lunes, 24 de octubre de 2011

ECONOMISTAS VS ANALISTAS VS GESTORES

La mayoría de la gente no tiene clara las diferencias entre unos y otros, por eso he querido dedicar este artículo a explicar algunas diferencias entre ellos.

Los economistas suelen centrar su estudio en la economía (macroeconomía). Como las variables de ésta cambian lentamente (el paro, la productividad, la morosidad, la renta per cápita, el déficit, etc), sus predicciones son a años vista. Esta longitud de miras en sus planteamientos hace que los mercados, movidos en el día a día por operadores de corto plazo, y los políticos, centrados en los plazos electorales, ignoren los resultados de esos análisis. De hecho, muchos de los riesgos materializados en esta crisis fueron ya advertidos años atrás, cuando nadie quería escucharlos, pues las medidas preventivas hubieran apagado la música en la fiesta inmobiliaria y crediticia. ¿Qué político se hubiera atrevido a ser acusado de explotar la burbuja?¿Qué banco de inversión se hubiera arriesgado a quedarse fuera de la fiesta durante varios trimestres? Ya lo dijo Lloyd Blankfein, CEO de Goldman Sachs, cuando le preguntaron cómo pudo la banca asumir tanto riesgo, “mientras suena la música, hay que seguir bailando”.

Los analistas serían economistas dentro de los bancos de inversión que, aunque también miran el largo plazo, se centran más en el corto. ¿Por qué? Porque venden directa o indirectamente su análisis económico y sus recomendaciones de inversión (de empresas, sectores, etc), y el sell-side (así se les conoce en el mundillo) sabe que en un mercado bajista se vende menos análisis y se intermedian menos operaciones. Es decir, si pinto un escenario muy feo, los clientes no hacen muchas operaciones de compra/venta, se quedan quietos, y eso no genera comisiones. Por eso, tienen un sesgo natural y acentuado hacia el optimismo sistemático, minimizando los riesgos y magnificando lo positivo. Sólo las pequeñas casas independientes se atreven a ser políticamente incorrectos en su mensaje y decir con más libertad lo que piensan, porque deben intentar añadir valor a sus clientes para competir con los grandes bancos.

Los gestores son los que toman las decisiones de inversión para sus clientes. Para ello, recopilan la información publicada por analistas, gobiernos, agencias de información, etc. El perfil cambia mucho de las grandes entidades a las pequeñas. En la grandes entidades, la gestión de inversiones es sólo un producto más que ayuda a fidelizar/vincular al cliente. La banca obtiene la rentabilidad sumando la que generan todos los productos vendidos (“colocados”) al cliente. En el sector financiero, esto se llama venta cruzada, en el ganadero sería "del cerdo se aprovecha todo". De hecho, su asesor básicamente contactará con usted si cree que se va a marchar, si cree que tiene más dinero (una herencia, lotería, venta de un inmueble, etc), o si tiene que colocar algún producto nuevo que está en campaña comercial.

Del negocio de gestión, los bancos sólo esperan que sea razonable, es decir, que no sea un motivo de enfado y/o marcha del cliente. Si el cliente pierde dinero no importa tanto como no ser el feo de la clase, para evitar que se vaya a otro banco que lo haya hecho menos mal. Los gestores de entidades independientes deben intentar añadir más valor en su gestión que los de las grandes, pues la gestión es su principal fuente de ingresos. Por eso tienden a ser más prudentes, porque saben que, la mayoría de personas, aguanta mejor el dejar de ganar que el sufrir importantes bajadas en su patrimonio. Los traders son los gestores de la banca que invierten el dinero de dicha entidad, normalmente con un horizonte de inversión de muy corto plazo.

Tras años trabajando en el sector financiero, hay dos fenómenos que siguen sorprendiéndome. El primero es la gran fidelidad de los clientes hacia su entidad financiera. En algunos casos, incluso tras haberle colocado productos que resultaron ser tóxicos. La mayoría, de cuando en cuando, maldecimos a la entidad financiera de la que somos clientes, pero muy pocas veces hacemos algo para remediarlo, nos cuesta mucho cambiar de entidad. Creo que esto ocurre porque tendemos a pensar que en la nueva entidad tendremos los mismos problemas, que todos son iguales.

El segundo fenómeno es la atribución de conocimientos e inteligencia por el hecho de trabajar en el sector financiero. Lo prometo, ¡¡nada más lejos de la realidad!! Sólo somos gente con algo más de información que la mayoría, y eso luce mucho. De hecho, siempre he pensado que este sector, al igual que la política, admite toneladas y toneladas de ineptitud y mediocridad, por que el cliente seguirá siéndolo igual que la mayoría seguirá votando al mismo partido, aunque pongan a un simio por cadidato.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...