jueves, 17 de mayo de 2012

BANKIA: LA OBLIGADA PASTILLA ROJA PARA LOS ESPAÑOLES

En los inicios de este blog, en uno de los primeros artículos (En Junio, Fin Del QE2: ¿Se Acabó Matrix?) te expliqué cómo Bernanke estaba obligándonos a todos a jugar a Matrix. Con sus inyecciones monetarias a la banca y a su jefe, Obama, que no a la economía, adulteraba el conjunto de mercados financieros, provocando, financiando y orientando oleadas especulativas "al alza" en muchos activos cotizados. Hasta suena bien, como si fuera algo bueno para la economía que el dictador benévolo decida a dedo elevar el valor de nuestros bienes cotizados, sustituyendo al libre mercado.

Entonces, califiqué sus medidas monetarias, sus chutes, de droga financiera orientada a distorsionar la realidad reflejada en el precio de esos activos antes de sus intervenciones. El que fuera artificial, injusto socialmente, peligroso sistémicamente, etc no importaba. Como dijo el CEO de una de las grandes empresas financieras del mundo, a los mercados les gustan los dictadores. Le faltó añadir lo que se da por hecho ... porque les benefician a dedo con el dinero de todos y para riesgo de todos.

Cada tres trimestres aproximadamente, la economía y los mercados me recuerdan cuanta razón tenía yo al temerme, desde finales de 2009, que esta recuperación económica no era, ni es, sostenible por sí misma. ¿Por qué? Porque ha sido forjada con dinero fácil creado para la ocasión y no con reformas y ajustes en los excesos acumulados durante años a lo largo y ancho del sistema socio-económico occidental. Hoy, la gran mentira de Occidente no es que haya esperanza, sino que ésta pasa por seguir gastando el dinero que no tenemos hasta que un día, por arte de magia, y no porque hayamos ajustado los excesos cometidos, nos levantaremos y todo se habrá solucionado, la deuda, la desconfianza en la solvencia, la insostenibilidad del sistema, los déficits, etc. Por eso no aguanta la recuperación y cada varios trimestres los bancos centrales vuelven a inyectar más dinero a sus amigos (bancos y gobiernos), para provocar otro rebote especulativo al alza junto con un tímido tirón de la actividad productiva, más basado en el miedo (a que sigan subiendo las materias primas que compro para fabricar) que en la confianza (en la recuperación del consumo final).

Las personas necesitamos esperanza, más incluso que soluciones, sobre todo cuando la realidad es mala y el remedio doloroso, por eso nos agarramos a un clavo ardiendo. Estos días, mi teléfono parece el de un astrólogo de los de la tele. Ya lo cojo diciendo: Aquí Rappel, futurólogo.La caída de Bankia ha despertado al ciudadano español de a pié del sueño de "ya se arreglará todo" vendido desde los medios de comunicación por los organismos oficiales "por el bien común". Bankia nos ha obligado a tragarnos la pastilla roja, la que nos muestra lo que realmente hay. Como siempre en economía y política, se llama bien común a que el médico le diga al paciente con cáncer que tiene un gripazo, pues la realidad no generaría confianza. Pero la realidad, una vez más, se abre camino frente a la dulce mentira que nuestra sociedad le pide diariamente a los medios de comunicación, y lo ha hecho como suele hacerlo el que lleva tiempo injustamente silenciado, llamándonos por nuestro nombre: "gilipollas".

Los somos por creer que los importantes y prologados excesos no requieren importantes y prologados ajustes, por actuar como si no importaran las bajadas generalizadas de ratings soberanos ni al sector financiero, ni la quita griega, ni la caída de Dexia y otros, ni los artificialmente bajos tipos de interés a corto y largo plazo, ni las manipulaciones sistemáticas de las cotizaciones (de bonos, divisas, bolsas, etc), ni los déficits sistemáticos, ni las mentiras contables comúnmente aceptadas, ni las ayudas públicas arbitrariamente concedidas. ¿Qué le vamos a hacer si ya no cabe más mierda debajo de la alfombra?

Considéralo una promesa de este bloguero: antes de que acabe el año 2012 (o incluso el verano), las turbulencias financieras traerán el Quantitative Easing 3 de la Fed, y/o el LTRO 4 (préstamos del BCE a la banca) y/o más compras de deuda soberana por parte del BCE. Otro chute para sus adictos amigos con el habitual argumento de "si no lo hacemos se acabará el mundo, por enésima vez". Mi esperanza, como ciudadano español, es que el gobierno siga ajustando a la baja presupuestos, plantilla pública, empresas públicas, inversiones, etc. porque eso implica sanearse y considero que es el primer pilar imprescindible si quieres sembrar un futuro bueno y sostenible. Que el PIB caiga un poco más o un poco menos, y que eso haga que cumplamos o no con el objetivo de déficit prometido a Bruselas lo considero accesorio, pues realmente es el acicate para justificar socialmente ese ajuste. Igualmente, que el futuro sea dentro o fuera del euro, aunque desee que sea dentro, no es tan importante como llegar a esa encrucijada financieramente saneado.

En mi opinión, el mayor problema de Grecia no es que seguramente se saldrá del euro en los próximos meses (ese sería su segundo mayor problema), sino que paralizar las reformas prometidas servirá como excusa, causa, y efecto, para mantener un sistema socio-económico, el griego, absolutamente ineficiente. Utilizarán la debilidad de su divisa para evitar las reformas necesarias. Con lenguaje populista convertirán en virtud nacional los defectos que les han llevado a su situación actual. Pues nada, a continuar viviendo del Estado, que la experiencia histórica del Telón de Acero augura un gran nivel de vida, bienvenidos a la Cuba europea.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...