REFERÉNDUM: LA PREDECIBLE SORPRESA GRIEGA

El lunes, el Primer Ministro griego, Papandreu, anunció un referéndum para que la población griega vote sobre la austeridad adicional exigida en el segundo plan de rescate, aprobado recientemente. La prensa y la burocracia europea se rasgan las vestiduras ante tal terremoto político y económico para la zona euro.

La diferencia con un terremoto es que éste no es predecible, y lo de Grecia era algo cantado, sólo faltaba ponerle día y hora. En ese sentido, te doy algunos datos:

1. Hace aproximadamente dos meses, los legisladores griegos anunciaron que estudiaban reformar la legislación de los referéndums populares. ¿Para qué se suponía que era eso, para cambiar los colores de la bandera? Todo esto ya se sabía, otra cuestión es que los políticos y los mercados decidieran no hablar de ello, como los tabúes prohibidos de cualquier tribu subdesarrollada de los Mares del Sur. 
2. El último informe de la Troika (UE+FMI+BCE) dejó muy claro que Grecia no había cumplido con los objetivos fiscales, ni con las reformas estructurales, ni con las privatizaciones, algo que no impidió que se aprobara seguir prestándole como si nada. Dicho informe también dijo que, incluso aplicando una quita del 50%, la deuda sobre PIB del país heleno estaría en 2020 al 120% (lo mismo que a finales de 2009), ¡¡y que no se normalizaría hasta 2030!! Otra información irrelevante para la bolsa, los gobernantes, etc. ¿Es que alguien en su sano juicio se cree que la sociedad griega, en constantes manifestaciones y huelgas, aceptará pagar durante dos décadas las deudas de la generación actual? Sea ahora, o más adelante con más dinero prestado, algún dirigente griego deberá preguntarle a su pueblo qué camino con todas sus consecuencias elige andar. Sobre Grecia, siempre ha habido una cosa muy clara, haga lo que haga y digan lo que digan los funcionarios europeos, nunca la echarán del euro, porque temen un contagio a otros países. Esa ha sido siempre su fuerza. Si finalmente se sale de la moneda común será porque quieran los griegos.
3. Los rumores en las últimas semanas de que Papandreu podría abandonar son algo lógico, no parece probable que se jubile dentro de muchos años del puesto más odiado y estresante de Grecia. Hoy, las bolsas europeas suben entre rumores de dimisión de Papandreu, o de que se retirará la propuesta de referéndum, o de lo que sea. Lo importante es matar al mensajero y no hablar de los tabúes. La aceptación social a las exigencias del rescate no parece algo importante para los mercados ni los políticos europeos. Para mí, es crucial para darle credibilidad y viabilidad al duro y largo plan de ajuste. Como ya advirtió hace meses el Presidente del IFO alemán, si la sociedad griega no acepta una rebaja de su nivel de vida del 20% para seguir en Europa, podría haber grandes desórdenes sociales. La función del referéndum sería aclarar esa cuestión, aunque no guste hablar de ello.

Sobre el porqué del anuncio de Papandreu en este momento se dice que Venizelos, el Ministro de Finanzas, podría tener mayores aspiraciones políticas y es posible que los líderes europeos le estén apoyando, lo que no gustaría a Papandreu. Venizelos declaró no saber nada del anuncio del referéndum.

En cualquier caso, afortunadamente para Europa, dentro de unos días veremos a Sarko y a Angela posar juntos, sonriendo y cogiditos de la mano, disimulando mientras sus carreras políticas penden de un hilo. Esa foto, acompañada de unas bonitas declaraciones sobre la maravilla europea, bastará para dar por finiquitada esta nueva crisis. Que hoy Portugal e Irlanda estén tanteando una mejora en las condiciones de su rescate (tras aprender de la quita griega) o que el BCE siga rescatando diariamente a Italia y España comprando su deuda no le importa a nadie, como ocurría con lo del referéndum hace dos meses. Dentro de un tiempo, ya nos haremos los sorprendidos de lo que pueda venir.

Termino con una reflexión: Para Grecia, ¿cuáles son la desventajas de salir del euro?: ¿Fuga de capitales? Ya llevan meses saliendo al extranjero. ¿Bancos quebrados a los que recapitalizar/nacionalizar? Ya están ahí. ¿Gran deuda en otras divisas diferentes al dracma? Para eso existe la quita. ¿Y las ventajas?: divisa débil que permitirá exportar, y abaratar la mano de obra para las empresas extranjeras. La verdad, llegados a este punto, no está nada claro cual es la mejor opción para Grecia, sólo cuál es la mejor para el resto de la eurozona.